Mi proyecto del mes de Adictos a la Escritura (Alex, no participo este mes), consistía en mezclar dos personajes en un mismo texto. En mi caso, me tocaron los personajes de un Fiura y un Sátiro. Me costo un poco de trabajo y todo, pero supongo que al final lo conseguí.
Cuestión de sueños.
“Ten
cuidado con tus sueños: son la sirena de las almas. Ella canta. Nos llama. La
seguimos y jamás retornamos” - Gustave Flaubert.
El olor penetrante solo lograba hacer que su cabeza diese vueltas mientras trataba en vano de enfocar la vista en algún punto. Algo que desentonara en las diferentes tonalidades verdes que se mostraban frente a ella. Algo diferente a eses follaje que parecía sacado de una de esas películas de terror de bajo presupuesto.
Apoyo su cuerpo con suavidad contra un tronco, que parecía proferir un gemido lastimero al sentir su espalda contra su frágil madera, ya vieja por el tiempo. Su respiración se altero cuando noto un rápido rayo de luz unos metros más allá de donde se sostenía, incapaz de formar una idea coherente frente a lo que estaba viviendo.
El crujido de una rama le alerto de que no estaba sola en el oscuro pasaje y realmente trato de tranquilizar a su agitada mente con la esperanza de que fuera solo un conejo. Un pequeño conejo de piel blancuzca con pequeñas pinceladas de chocolate. Pequeño e inofensivo. O tal vez un cervatillo o un osezno… O cualquier animal que de ninguna forma pudiese causarle algún tipo de daño.
.- ¿Quién es esta dulce joven que ha decidido visitar mi morada? – la voz profunda no provenía de su lado, tal como los pequeños crujidos de ramas rompiéndose que comenzaban a acercarse y en su mente siguió repitiendo; casi como un mantra; ‘Solo es un conejo, un inofensivo conejo’.
Trago aire como si fuera una tarea de gran envergadura y cerro los ojos al notar la caliente respiración contra su nuca; - He preguntado… ¿Quién es esta joven que ha decidido interrumpir mi baño? – junto a la voz, a la que le dio un tono femenino, broto a lo lejos el sonido del agua chocar contra la piedra pero su mente no supo catalogar aquello como un sonido en especifico, estaba más ocupada en la respiración contra su cuerpo y el como un cuerpo pequeño se presionaba contra su pierna.
La mano se aferro a su pierna desnuda y noto como la garra perforaba la gruesa pantorrilla de jugadora de futbol que mantenía. Abrió sus labios pero ningún sonido broto de su garganta mientras sentía la sangre correr hasta su zapatilla y tal vez, el suelo.
.- Me temo, señorita. Que aún espero una respuesta – la fría mano se deshizo del agarre de su pierna mientras la empujaba asía adelante y ella, como una muñeca sin voluntad, se dejaba caer contra el suelo verde y se limitaba a entrecerrar los ojos, sin saber donde ver y que esperar.
La figura frente a ella no media más de un metro y la larga cabellera negra cubría a grandes rasgos su pálido rostro, dejando a la vista solo sus ojos chispeantes de maldad y una sonrisa torcida de gestos amarillentos.
Su cuerpo, cubierto de lo que parecía una manta de opaco rojo, se movió con sigilo mientras se ubica sobre ella y sin dejar de sonreír entreabrió sus labios y dejo escapar su aliento. Como un animal muerto, eso fue lo que distinguió su nariz mientras sentía que su brazo se retorcía con demasiada fuerza y luego el crack de su hueso que cedía ante la presión.
.- Es una lástima, señorita – la voz giro dentro de su cabeza como si le hubiera grita a la altura de su oído, más seguía ahí quieta, frente a ella con una sonrisa bailando en su perpetuo rostro – Si fueras un musculoso chico, tal vez lo consideraría pero no lo eres y me temo, señorita…
Pero la frase se quedo a la mitad mientras el sonido de una flauta lenta inundaba el verde follaje que la rodeaba, su brazo continuaba con el dolor punzante y los ojos chispeantes parpadearon con una luz distinta mientras retorcía su cabeza sin siquiera mover un centímetro su pequeño y raro cuerpo.
Lo primero que alcanzo a distinguir fueron los cuernos, de una pálido café para luego el blanco de su piel contra el verde de los arboles. El sonido de sus pisadas resonaba como los caballos y sus dos cortas patas, cubiertas de aquel vello café, contrastaban con el paisaje oscuro.
.- Um… Un nuevo visitante, quizás con este si tenga la suerte suficiente – y quizás sin darse cuenta se levantó de un salto mientras plantaba las palmas de su mano contra el suelo y dejaba que su cuerpo, invertido, mirara con deseo al extraño visitante de cuernos y una flauta contra sus rotos labios.
Lo siguiente que sus ojos captaron fue el lento baile que la mujer consiguió aún caminando con sus manos mientras el extraño animal la observaba en silencio, con el deseo en el borde de su sonrisa y la emoción sobresaliendo en sus pequeños ojos.
…
Abrió los ojos mientras se sentaba con un rebote contra su cama. El libro choco contra el suelo en un golpeteo estridente y sus ojos vagaron por el reloj: ‘3:30 a.m.’ Poso entonces su atención en los libros que rodeaban su cuerpo, leyó con escepticismo el titulo del libro sobre leyendas chilotas y el otro que rezaba el titulo griego y con una promesa muda, se dijo nunca volver a tratar de aprenderse aquellas historias y menos los personajes, momentos antes de dormir.
Se acostó de nuevo y respiro con calma, solo era cuestión de sueños. Dejo entonces de lado la idea del cuerpo pequeño de cabello negro que se fundía con el de cuerpo de humano y patas de cabra, mientras su alrededor era verde y solo verde.
(...)
Siendo eso todo, espero les haya agradado leer mi pequeño escrito y les haya puesto a pensar.
Para mayor información sobre las figuras de mitología que hacen parte de este escrito, den click en el nombre e irán a la página de Wikipedia. (Fiura - Sátiro)
Un beso
Lu
Hola Colega;
ResponderBorrarLeí tu relato anoche pero no me había quedado tiempo de comentarlo. De hecho no lo tengo ahora pero estoy robándole unos minutos al "tiempo compartido en familia" para dejarte este mensaje.
Me gustó el relato; menos mal que solo era un sueño.
Solo hay dos cosas que me hubiera gustado que fueran diferentes: "Que mencionaras los nombres de los personajes (Fiura y Satiro) y que no mencionarás lo siguiente: Siendo eso todo, espero les haya agradado leer mi pequeño escrito y les haya puesto a pensar"
Hasta luego
Hola! El relato no está mal, pero podría mejorarse mucho si chequeas las tildes ausentes, la puntuación, algunos errores de tiempo, y en la frase "mientras la empujaba asía adelante y" la palabra correcta es "hacia".
ResponderBorrarA escribir se aprende escribiendo, todo es cuestión de práctica y de ir mejorando día a día. A seguir adelante!!!
Saludos :)